Y a la séptima no acabó de dar la vencida

¿Quién dijo que las séptimas partes nunca eran buenas? Aquí tenemos la nueva (que no última) adaptación de Harry Potter, pero algo falla.

-¿De verdad que cortasteis la película en dos partes para abordar más puntos de la historia...?

-Que sí, que sí...

Bueno, pues entonces me lo creo. Como fan que me considero del mago con la cicatriz en la frente si me preguntan por la película debo responder que tendré que esperar a que salga la segunda parte, aunque la sensación que me dejó fue buena.

 Está mejor adaptada que la anterior, pero le falta personalidad (cosa que sí supo darle Alfonso Cuarón a la tercera). Hay algo más que me chirría y es esa oscuridad continua con sus tonos apagados. Se supone que la historia ya es tenebrosa de por sí, ¿por qué darle ese toque tan soso?¿acaso para parecerse a Crepúsculo? Júzgalo tú. De todas formas cabe destacar la secuencia de la narración de “La Fábula de los tres hermanos” que tiene una estética muy bella (incluso parece salida de una creación de Tim Burton).

  La narración es irregular, y parece que en ese afán de abarcar más el director se olvida de los que sólo han visto las películas e incluye elementos sin explicar su procedencia. La banda sonora es bastante buena al principio pero luego se va diluyendo y apenas se nota. En cuanto al reparto principal se nota la mejoría de Emma Watson (Hermione) y Rupert Grint (Ron) que, aunque Daniel Radcliffe (Harry) también ha evolucionado, se comen las escenas en las que aparecen. Sea como sea cuando todo termina te deja con ganas de ver más de forma que te la recomiendo y le doy un 7,9/10.

Dirección: David Yates

Guión: Steve Kloves

Intérpretes: 

Danniel Radcliffe

Emma Watson

Rupert Wrint

Ralph Fiennes

Título Original: Harry Potter and the deathly hallows

País: EEUU

Año: 2010

Duración: 146 minutos